viernes, 11 de diciembre de 2009

Así terminamos el año

Discurso del Representante Legal a los alumnos

Terminar los proyectos que comenzamos es algo muy importante en nuestras vidas. Nos permite crecer y madurar…

Porque, de la misma manera que otros seres en la naturaleza, en el hombre hay crecimiento y maduración.

Crecemos porque vamos cambiando… nuestro cuerpo se va modificando… y también nuestro espíritu.

Lo que fuimos e hicimos ayer nos fue preparando para lo que somos y hacemos hoy… y lo que somos y hacemos hoy, nos va preparando para lo que seremos y haremos mañana. El ser humano tiene pasado, tiene presente y tiene futuro.

Pero a diferencia de los otros seres de la naturaleza, el futuro del hombre no está determinado absolutamente.

El quimil, por ser quimil, siempre dará frutos amargos… y la tuna, por ser tuna, siempre dará frutos dulces.

El algarrobo negro, por ser algarrobo negro, siempre dará frutos “patalca”…. Pero el algarrobo blanco, por ser blanco, siempre dará frutos dulces. Aunque se parezcan exteriormente, producen algo diferente.

También los frutos de la persona humana, los frutos de nuestras acciones, pueden ser dulces o amargos. Pero a diferencia del quimil o del algarrobo, nosotros podemos hacer que nuestros frutos, es decir, el resultado de las cosas que hacemos, sean “dulces” o “amargos”.

Decimos que el fruto de nuestras acciones es “dulce”, cuando nos produce una satisfacción, y nos sentimos felices. Y decimos que el fruto de nuestras acciones es “amargo” cuando nos produce frustración, y nos sentimos mal.

Todos, en principio, estamos buscando estar satisfechos y felices; pero no siempre lo logramos.

Estamos satisfechos y felices cuando alcanzamos nuestras metas; y estamos insatisfechos y nos sentimos mal cuando no lo logramos.

En este fin de año, algunos de nosotros estamos satisfechos y algunos no. Algunos estamos felices por los frutos alcanzados y otros nos sentimos mal. ¿Qué se conviene hacer? ¿Qué aprendimos –digo- además de matemática o de lengua… o de lo que no aprendimos?

El hombre es el ser que en la naturaleza siempre puede mejorar… o empeorar. La realidad de cada uno no es definitivamente buena, ni definitivamente mala, sino mejorable. En eso somos distintos de los demás seres de la naturaleza.

Como nuestra realidad no es definitivamente buena, tampoco actuamos bien sin más; actuar bien es costoso, muy difícil, no sale sin un esfuerzo. Los que obran mal no son “malos”, son perezosos y no se han capacitado para obrar bien.

Obrar bien el bien es muy difícil y no nos es connatural, pero tampoco contranatural, sino que es “posible” pero “difícil”. Hay innumerables maneras de errar el blanco, decía Aristóteles, pero una sola de acertar. El arquero tiene que aprender, y se aprende errando y rectificando. De ahí la importancia, de no darse por vencido. Cada vez que nos caemos, podemos levantarnos y continuar. Que la tristeza del error no nos lleve al desánimo y a sentir que no podemos… porque sí se puede.

Ustedes pueden. Todo lo que quieran lo van a alcanzar con su esfuerzo constante. Por eso es mejor elegir cosas buenas, porque definitivamente corremos el riesgo de alcanzarlas.

Cada vez que “decidimos” hacer algo, y cada vez que decidimos no hacerlo, estamos jugando nuestro futuro… y el futuro de los demás.

Hoy llegamos al final de un año más. Cosechamos lo que sembramos. ¡Nadie obtiene más de lo que da! Así como fue nuestro esfuerzo, así también es el resultado. ¡Felicitaciones a los que tienen buenos resultados! Y ¡ánimo a los que todavía tienen materias pendientes! Aún hay una oportunidad… No hagan del desánimo una excusa para la irresponsabilidad.

El Chaco salteño necesita ciudadanos responsables, no hacen falta más flojos, ni aquí, ni en cualquier lugar del mundo.

Quiero que hagamos nuestros los versos de Amado Nervo:

Muy cerca de mi ocaso, yo te bendigo, vida,porque nunca me diste ni esperanza fallida,ni trabajos injustos, ni pena inmerecida;porque veo al final de mi rudo caminoque yo fui el arquitecto de mi propio destino;que si extraje la miel o la hiel de las cosas,fue porque en ellas puse hiel o mieles sabrosas:cuando planté rosales, coseché siempre rosas.

Agradezco a ustedes, a los docentes y al personal de apoyo por todo el esfuerzo de este año, y los invito a todos a crecer, a mejorar, y a sentir la satisfacción de las cosas bien hechas.